La comunicación no siempre resulta eficaz

El futurólogo John Naisbitt (Megatrends) describió hace años la sociedad económica en tres etapas: agraria, industrial y la de la información. Hoy estamos en la tercera. Y ampliada, en realidad, diría, la de la supercomunicación.
 
El periodismo es justamente y fundamentalmente comunicación. Dentro de esta profesión las especializaciones en vino y gastronomía están en auge. Dos temas emparentados con la vida.
 
El vino es un elemento casi mágico (el racimo transformado en vino) y base de una industria pujante: la vitivinícola. La Gastronomía, un hecho que va de lo cotidiano a la gran especialización.  Y ambos temas fundamentales para otra industria, la del Turismo.
 
Hay escuelas, universidades, cursos que enseñan periodismo, comunicación, pero ahora me pregunto ¿Qué pasa hoy con los comunicadores empresarios (las bodegas y los restaurantes son empresas) en estas especialidades?
 
Las informaciones que envían ¿están bien pensadas? ¿Son adecuadas?
 
Vamos a consultar que dicen los que saben, como Alberto Borrini y otros especialistas.
 
"El vínculo con las principales audiencias a través de los medios es un desafío permanente. Transformar la Información en Noticia y lograr los espacios de difusión constituyen uno de los segmentos de acción de mayor movilidad, desde productos hasta funcionarios de la empresa, según la estrategia trazada".
 
Aquellos que se dedican a hacer prensa teóricamente deben saber lo fundamental: Adecuar el mensaje a los códigos y técnicas de redacción utilizados en distintos medios de comunicación a los que se van a dirigir. Entonces básicamente, por ejemplo, como enviar una gacetilla redactada de tal forma que logre captar el interés del medio. No es igual un periódico, una revista, una web o un blog, porque los públicos tampoco son iguales.
 
Adjuntar material fotográfico o ilustraciones, bien pero entonces llega la primera duda. ¿Tienen idea de la cantidad de material y gacetillas que llegan a una redacción? Sea de medios gráficos o de páginas, blogs, etc.
 
El comunicador empresario debe comunicar, valga la redundancia, un mensaje. Cómo lo envíe, es un detalle que puede ser fundamental. Vamos al mensaje mismo. ¿Cómo le llega al periodista tapado de noticias?
 
Los textos enviados en pdf son bellos y bien diseñados por lo general, pero obligan al periodista a traducirlos para poder trabajar. No sería más fácil enviarlos por ejemplo como adjunto en dos versiones, pdf  y simple Word. Con buen criterio hay profesionales que ponen la versión simple en el texto del mail y el pdf como adjunto.
 
Una satisface al cliente (buen diseño), la otra facilita la tarea del que la recibe.
 
Otro detalle es la adjetivación. Muchos adjetivos en torno a un producto no hacen necesariamente que sea más atractivo para el periodista receptor. Por el contrario. Simple, directo, correcto, obviamente mencionando todo lo que se necesita comunicar, es lo mejor, según mi criterio.
 
Porque la adjetivación excesiva también demora, ya que en los medios la cantidad de palabras y líneas es vital.
 
Otro tema es el léxico, sobre todo hay que cuidar el real significado de las palabras. Alguien escribió que es significativa la cantidad de restaurantes y tugurios que pueblan el horizonte culinario. Alguien que no tenía la más mínima idea del significado de las palabras, pero que tampoco consulta el diccionario (y los hay también en Internet como el de la RAE, ¡al alcance de los dedos!). Pasa lo mismo con las fechas cuando la idea es traer a colación un acontecimiento importante del pasado. O aquello que dijo un periodista y recogió un amigo:
 
"Les queremos contar cómo va a ser el debate, las temáticas de los temas..." (hace doler los ojos y los oídos)
 
Hay más temas, por ejemplo, el de las fotografías, pero eso lo dejamos para una próxima nota.