El Vino “color de Buenos Aires”

Buenos Aires tiene un color y un olor reconocible. Y aquellos porteños que  pasan largo tiempo en el exterior saben bien a que nos referimos.
 
Pero, en este caso y hablando de vinos, el “color de Buenos Aires” se denominaba al vino que allá por los años setenta era el que más se vendía en la ciudad. El consumo era de tinto  y un “rosado con pretensiones de tinto”. Los rosados eran débiles y se reforzaban con uvas “tintoreras” como la Malbec. Porque se trataba de “no descender de una tonalidad  llamada Color Buenos Aires”.

Se implantaron cepajes rústicos que daban color, como la Malbec que era tratada desde el viñedo como uva segundona, tal como se la denominaba en Francia. Integraba los cortes de los genéricos populares, porque es un cepaje que puede dar enormes cantidades, es buena para color y sabor y por lo tanto muy útil.
 
De los años 70 a los 80, hubo preferencia por blancos. Que con el advenimiento de los Varietales, una modalidad de elaboración  llegada de los EEUU (impulsada por Robert Mondavi) que adoptaron bodegas argentinas, los blancos quedaron relegados nuevamente a un  segundo plano.
 
La Malbec sufrió altibajos. Fue erradicada en parte en beneficio de la Cabernet Sauvignon que se pensó iba a ser más exitosa en el exterior…pero, bodegueros inteligentes se dieron cuenta que tratándola como uva fina, Malbec podía llegar a dar grandes vinos. Y volvieron a plantar nuestra cepa emblema. ¡Bien por los lúcidos!

Hoy el “color de Buenos Aires” es el tinto, sin duda. Tintos de todas las gamas de precio y calidad que pueblan las góndolas con cientos de etiquetas.

El siglo XXI vuelve a poner en danza al blanco, desde el Torrontés que nos da muchas satisfacciones, pero también los Viognier y Sauvignon Blanc o los grandes Chardonnay criados o elaborados en barrica.

¿Elegimos algunos? En blancos alta gama Angélica Zapata Chardonnay cosecha 2005  - Q de Familia Zuccardi Chardonnay cosecha 2009 - Gala 3 2008 de Luigi Bosca: Viognier 50%, Chardonnay 40% y Riesling 10%- Torrontés Gran Linaje 2008 de Etchart. En tintos (el color porteño) alta gama de Bodega Poesía (del Grupo Garcin-Lévequè), el Clos des Andes, Malbec 2006 - de Dante Robino el Gran Dante Malbec 2007 – y el Buenalma de Bianchi, el Malbec orgánico de Finca Dinamia.